Cómo hacer leche condensada casera en solo 3 minutos ya no necesitarás comprarla

La leche condensada es un ingrediente esencial en la repostería, ideal para postres, pasteles y muchas recetas dulces. Sin embargo, no siempre es conveniente ir al supermercado solo para comprar este producto. ¿Sabías que puedes prepararla en casa de manera rápida, sencilla y con ingredientes básicos?

En este artículo, te enseñamos una receta casera de leche condensada que podrás hacer en solo tres minutos y que tiene el mismo sabor y textura que la versión comercial.

Receta fácil de leche condensada casera

Con esta receta, obtendrás aproximadamente 340 gramos de leche condensada lista para usar en tus preparaciones favoritas.

Ingredientes:

• 1 taza de leche en polvo (preferiblemente entera)
• 1 taza de azúcar
• ½ taza de agua caliente

Preparación paso a paso:

1. Agrega el agua caliente a la licuadora, este paso es importante para evitar que la leche en polvo se adhiera al fondo del recipiente.

2. Añade la leche en polvo y el azúcar, incorpora ambos ingredientes asegurándote de respetar el orden para lograr una mejor mezcla.

3. Licúa la mezcla hasta que el azúcar se disuelva por completo y obtengas una consistencia homogénea y espesa.

4. ¡Lista para usar! Puedes utilizar tu leche condensada casera inmediatamente o guardarla en un frasco hermético en el refrigerador.

Cómo hacer leche condensada casera fácil y rápido

¿Cómo utilizar la leche condensada casera?

Una vez lista, puedes emplearla en cualquier receta que requiera leche condensada convencional. Úsala para preparar:

• Postres como flanes, pudines y brigadeiros.
• Rellenos de tartas y pasteles.
• Dulces caseros y bebidas cremosas.

Consejo 💡: Si deseas una textura más espesa, deja reposar la leche condensada en la nevera por unas horas antes de usarla.

Beneficios de hacer leche condensada casera

• Ahorro económico: Prepararla en casa es más barato que comprarla en el supermercado.
• Control de ingredientes: Puedes ajustar la cantidad de azúcar o utilizar opciones más saludables.
• Fácil y rápida: Solo necesitas tres minutos y una licuadora para obtener un resultado perfecto.

Después de probar esta receta, ¡seguro que nunca más comprarás leche condensada en el mercado! ¿Te animas a intentarlo? Comparte esta receta con tus amigos y sorpréndelos con su delicioso sabor casero.

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